A nivel personal he sentido que era "el viaje" con el que he soñado durante mucho tiempo. Me ha despertado sensaciones, emociones y sentimientos profundos que quizás tenía dentro pero dormidos. Ha sido " un gran despertar", a la vida, a la conciencia, al espíritu. Un empujón al propio crecimiento personal, a sentirme UNO con la humanidad, a saber que todos estamos en el mismo camino y formamos una gran familia, que todos somos parte de esa Unidad y estamos conectados. Que la Humanidad todavía tiene esperanza y que existe mucha Bondad oculta por el mundo. A nivel de viaje, lugares, organización, etc... Prácticamente tengo poco que apuntar; Me ha encantado todo el trayecto, los lugares que hemos visitado, lugares sagrados y espirituales intensos... Por último el Ashram, como tú bien dices, "la guinda" final. A mi casi me deja en shock, pero he de decir que me "encantó y emocionó profundamente", creo que no lo olvidaré en la vida... una experiencia única e intensa, digna de vivirla y un privilegio estar ahí con Amma. Por último, también me ha gustado el mindfulness con Charo, creo que es una acertada elección y buena combinación.
El viaje que hemos hecho, es un gran viaje, muy variado y completo, alternando las vivencias o estancias más “durillas” con alguna otra más relajadita. En cualquier caso, este viaje hay que hacerlo con buena resistencia física, ya que tiene varios y seguidos madrugones. Como viaje experimental es muy valioso, sin desperdicio, porque reflexionando en ello (ahora ya en casa) lo valoro, muy, muy positivo. Es verdad, que si no fuera por la experiencia de Yoguindia no sería posible hacerlo. Un beso grande
Mi experiencia del viaje ha sido totalmente positiva y personalmente muy enriquecedora. De todo el viaje lo que más me gustó fue la estancia en Tiruvannamalai, el recorrido a la montaña sagrada ha sido una de las mejores experiencias y la subida a las cuevas. La posibilidad de visitar Auroville fue muy interesante y creo que entrar en el Matrimandir es una experiencia que ninguna olvidaremos. Y especialmente emotivos fueron los días en la Fundación Vicente Ferrer. El recorrido en barca por los backwaters y viendo como hacía la gente su vida a la orilla fue algo que me impactó mucho también. No sé... podría extenderme mucho en cada detalle Magdalena. Por último comentarte que terminar en el Ashram de Amma a mi me parece muy acertado, aunque la vida bulliciosa del Ashram resulta chocante al principio creo que fue el broche final perfecto para cerrar el círculo de todas las experiencias y sopesar todo lo vivido. Y es cierto, una vez que regresas lo valoras mucho mas. Amma me ha dado mucho que pensar. Es un viaje para vivirlo y sentirlo. A mí me ha hecho muy feliz la experiencia, por el viaje y por todas vosotras. Gracias por todo y un beso muy grande.
Me siento enormemente agradecida por haber realizado este viaje, que no sólo es un maravilloso viaje al Sur de madre India, sino que ha resultado un gran viaje interior, produciendo en mí una enorme transformación interna que estoy segura que en gran parte va a perdurar. Muy muy agradecida a Magdalena por compartir con l@s demás su experiencia, conocimiento amor y devoción hacia esta India de l@s maestr@s. Y muy agradecida también a Charo, y a todo el grupo de personas maravillosas que me han acompañado. Recomendadísimo para tod@s aquell@s que quieran acercarse a esta zona del país viviendo una experiencia profunda a la vez que profunda. Muchísimas, muchísimas gracias Magdalena, de verdad que este viaje, junto con el proceso en el que estoy inmersa estos meses, ha operado en mí unos cambios vibracionales, que estoy segura que en gran medida no tiene vuelta atrás. Os mando tanto a ti como a Charo, agradecimiento y amor en todo momento. 🙂 Un enorme abrazo y mucha suerte estos días.
El viaje me ha gustado muchísimo, el ambiente con Charo y Magdalena ha sido estupendo y con las otras viajeras extraordinariamente inesperadamente bueno. El estilo o formato también me ha parecido bien, el número de días en cada sitio y en general las actividades programadas. Creo que ha sido una suerte completa que el nº de viajeras fuera tan reducido, en lugar de un grupo de 15 personas. Esto ha hecho que nos hayamos conocido todas mejor, sobre todo durante los trayectos en automóvil y las comidas, que permitían que estuviéramos en una misma mesa todas. Con este viaje he aprendido un poco lo que es la meditación y lo que puede alcanzarse con ella. Esto no hubiera sido posible en un viaje con otro estilo. Me he sentido cerca de la gente de allí, tanto en la fundación Vicente Ferrer como en el Ashram, e incluso caminando por el paseo marítimo de Pondicherry o rodeando Auranachala. Los he visto próximos, reales, amigables y esto me ha encantado. Un prolongado y fuerte abrazo.
La India es un país mágico, muy vital y el viaje ha sido una experiencia inolvidable. Una ruta emotiva, entrañable y conmovedora por los distintos lugares emblemáticos donde diferentes maestros se han preguntado sobre si mismos y sobre el sentido de la vida y como cada uno ha encontrado y ha transmitido sus propias enseñanzas y sus testimonios. También resaltaría el acompañamiento tanto dentro del grupo como con los guías locales, así como la acogida allí donde íbamos y el poder captar cada estilo de vida.
Para mí ha sido un viaje inolvidable, casi podría decir que el viaje de mi vida, por lo que deseaba realizarlo y por lo bien que resulto todo. La organización me ha parecido estupenda, pero creo que lo que ha contribuido a que el viaje fuese especial es la conexión que se produjo entre las personas del grupo. Enhorabuena a todas.